¿Alguna información? ¿Necesitas contactar al equipo editorial? Envía tus correos electrónicos a [email protected] o ve a nuestro formulario.
Estilo de vida

¿Es bueno comer el pollo con piel? Esto es lo que dicen los expertos

Se puede comer el pollo de ambas formas porque la piel es comestible, sin embargo, no tiene un gran interés nutricional.

Suscribite a nuestro canal para recibir toda la información

Comer el pollo con piel puede no ser lo más adecuado cuando lo que se pretende es mejorar el estado de composición corporal. Y es que esta parte del animal cuenta con una densidad energética elevada, lo que podría afectar la ganancia de masa grasa. De todos modos, se trata de lípidos de buena calidad, siempre y cuando no se sometan a tratamientos térmicos elevados.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el pollo es una de las carnes más consumidas. Resulta asequible por su bajo precio y cuenta con una gran versatilidad a nivel culinario. Consigue aportar muchas proteínas de alta calidad.

El valor nutricional de la piel del pollo

La piel del pollo se compone en un 32 % de grasa. Esto hace que su densidad energética sea elevada, lo que puede dificultar el cumplimiento de una pauta hipocalórica.

Se puede comer el pollo de ambas formas porque la piel es comestible, sin embargo, no tiene un gran interés nutricional. Además, es una de las partes expuestas a mayor cantidad de contaminantes y xenobióticos dentro de la producción animal, así que no aporta valor añadido.

Es cierto que a nivel culinario y en la preparación de las recetas muchas veces se busca dejar la piel del pollo para que la carne del animal no se deshidrate tanto, eso puede dar como resultado final una carne más jugosa.

En otras recetas también se puede buscar que la piel esté más crujiente para lograr contrastes, o que el interior se pueda preparar con una especie de «papillote», como podría ser en el caso de algunas alitas.

Independientemente de las preferencias culinarias, nutricionalmente no aporta nada destacable y por eso no sería recomendable por motivos nutricionales.

Es importante destacar que el tipo de alimentación del pollo influirá en la calidad de sus ácidos grasos. Cuando los animales viven en libertad y se alimentan con productos naturales, concentran en su interior mayor cantidad de omega-3 y menor de omega-6. Mantener esta relación nivelada se considera relevante para consolidar un buen estado de salud, según un estudio publicado en The Journal of Nutrition .

¿Le resultó útil este artículo?
Lee también:
James García Rodríguez
Últimas entradas de James García Rodríguez (ver todo)
Suscribite a nuestro canal para recibir toda la información