Colombia enfrentará déficit de gas en 2026 y dependerá de importaciones, admite el Gobierno
Sin embargo, el presidente sostiene que sí habrá exportaciones

El Ministerio de Minas y Energía reconoció este viernes que Colombia enfrentará un déficit de gas natural a partir del año 2026, estimado en al menos un 20%. Así lo admitió el ministro Edwin Palma, luego de que se revelaran las proyecciones contenidas en el XXVI Informe del Sector Gas Natural, presentado por Promigas en Barranquilla.
Según el informe, el país deberá depender de importaciones de gas por lo menos durante cinco años, un escenario que plantea retos tanto para la seguridad energética como para el modelo de abastecimiento nacional.
Frente a estas cifras, el presidente Gustavo Petro se pronunció a través de su cuenta de X, donde confirmó que el país tendrá que recurrir a compras externas, pero defendió la medida como parte de una práctica que, según él, no es nueva en Colombia. “La importación de gas natural ha existido hace años y desde anteriores gobiernos”, afirmó.
Sí habrá exportación
Sin embargo, el mandatario puso el foco en lo que considera un cambio estructural en el manejo de estas importaciones: la eliminación de monopolios privados en el proceso. “Solo hay un punto privado a donde llevan el gas importado y el dueño es el dueño de un diario. Creo que han cobrado por ese gas, más que el precio internacional del momento, como sucede en todo monopolio privado”, escribió el presidente Petro, sugiriendo que el nuevo enfoque del Gobierno busca garantizar mayor transparencia y equidad en el sistema.
Además, el jefe de Estado recordó que la Constitución prohíbe los monopolios privados, y enfatizó que su administración procurará un modelo más competitivo y regulado en caso de que las importaciones sean inevitables.
El debate sobre el abastecimiento de gas natural se da en un contexto donde se discute la viabilidad de nuevos proyectos de exploración, la transición energética y la necesidad de garantizar el suministro para hogares e industrias. Expertos han advertido que sin nuevas fuentes internas de producción, el país enfrentará un aumento en la dependencia externa y posibles alzas en los costos para los consumidores.
Por ahora, el Gobierno no ha detallado cuál será el plan logístico para suplir la demanda ni si contempla ampliar la infraestructura actual de regasificación, pero el mensaje es claro: Colombia se prepara para importar gas en medio de un panorama de déficit energético inminente.





