“Estoy sin palabras”: Dayro Moreno volvió a la Selección tras años de ausencia y dejó un mensaje a Néstor Lorenzo
El máximo goleador del fútbol profesional colombiano disputó 10 minutos del partido que clasificó al Mundial a la Selección Colombia

El regreso de Dayro Moreno a la Selección Colombia se concretó en el cierre de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026. En los minutos finales del partido frente a Bolivia, el delantero del Once Caldas volvió a pisar el campo con la camiseta nacional, un momento que no pasaría desapercibido para él ni para quienes han seguido de cerca su trayectoria.
El atacante ingresó al minuto 81 en lugar de Jhon Córdoba y disputó los últimos instantes del compromiso en el estadio Metropolitano de Barranquilla. Aunque no marcó, su participación representó un capítulo simbólico dentro de su extensa carrera profesional.
“Muy agradecido con Dios, con mi familia, con mis hijas, con Manizales, con Once Caldas, con mi pueblo (Chicoral), estoy sin palabras la verdad, tengo la misma sensación que cuando debuté en el fútbol profesional”, dijo Moreno al final del encuentro en declaraciones al canal oficial de la Federación Colombiana de Fútbol.
Una acción ofensiva en los últimos minutos
Durante el tiempo que estuvo en cancha, Moreno tocó el balón en cuatro ocasiones y generó una acción ofensiva en los últimos minutos. Si bien su influencia en el resultado fue mínima, su llamado por parte del técnico Néstor Lorenzo ha sido interpretado como una recompensa al rendimiento mostrado en el fútbol colombiano, donde recientemente se convirtió en el máximo goleador histórico.
Dayro también aprovechó para enviar un mensaje de agradecimiento al seleccionador nacional: “Los tiempos de Dios son perfectos, trabajo para esto, gracias a Dios con mi trabajo alcancé este objetivo y el profe que me dio la oportunidad”, afirmó.
Moreno, que ha pasado por varios equipos en Colombia y el exterior, no vestía los colores de la selección desde hace varios años. Su regreso se da en un momento de madurez futbolística y personal, y coincide con la clasificación oficial de Colombia al Mundial de 2026.
La escena de Dayro abrazando a Ramón Jesurún en la cancha, celebrando junto a sus compañeros, refleja más que un simple retorno: para el jugador tolimense, representa la validación de su esfuerzo reciente y la posibilidad —aunque no confirmada— de tener un lugar en la lista definitiva rumbo a la cita mundialista.
Su presencia en Barranquilla no solo fue un gesto del cuerpo técnico, sino un recordatorio de que en el fútbol, las segundas oportunidades también pueden llegar cuando se combinan resultados, constancia y una historia por cerrar.