Martes de terrorismo en Colombia: más de 11 ataques en pocas horas
Los ataques, que se registraron en al menos doce puntos del suroccidente colombiano, comenzaron en la madrugada.
Una serie de atentados con explosivos y armas de fuego estremecieron este 10 de junio a los departamentos del Cauca y Valle del Cauca, en lo que las autoridades han calificado como una ofensiva terrorista orquestada por disidencias de las FARC, particularmente por la estructura conocida como ‘Iván Mordisco’.
Los ataques, que se registraron en al menos doce puntos del suroccidente colombiano, comenzaron en la madrugada. En El Bordo, Cauca, un carro bomba fue detonado frente a la Secretaría de Tránsito, causando daños a la Alcaldía, viviendas y negocios cercanos. Minutos después, en Corinto, otro vehículo cargado con explosivos estalló a una cuadra del parque principal. En ambos casos no se reportaron víctimas, pero sí cuantiosas pérdidas materiales.
En declaraciones oficiales, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, informó que los atentados han dejado un saldo preliminar de cuatro muertos y varios heridos. Las víctimas mortales incluyen dos policías, un civil y un vigilante. “Este es un ataque contra la institucionalidad y contra la población civil. Estamos respondiendo con todas las capacidades del Estado”, señaló el funcionario en una rueda de prensa en la mañana del martes.
Uno de los hechos más graves
Entre los hechos más graves se cuenta el atentado en Cali, donde se registraron tres explosiones simultáneas contra estaciones de policía en los barrios Meléndez, Marroquín y Manuela Beltrán. En uno de estos puntos, una motocicleta cargada con explosivos fue activada frente a la estación policial, provocando la muerte de al menos dos personas.
En Caloto, Cauca, un uniformado perdió la vida en medio de un ataque armado, mientras que en Buenaventura se lanzaron explosivos contra el CAI de El Pailón, generando daños materiales. También se reportaron explosivos ubicados en las vías Cali-Andalucía y Palmira-Cali, así como en las inmediaciones del aeropuerto, los cuales fueron desactivados sin incidentes.
Videos difundidos en redes sociales muestran el momento posterior a varias detonaciones, evidenciando el nivel de destrucción y en algunos casos el sonido de ráfagas de disparos, lo que indicaría enfrentamientos armados entre los grupos ilegales y las autoridades.
El general Carlos Fernando Triana aseguró que los ataques hacen parte de una “celebración criminal” por el aniversario de la muerte de Leider Johany Noscué Bototo, alias Mayinbú, cabecilla de la columna móvil Jaime Martínez, una de las estructuras más violentas de las disidencias.
El panorama de seguridad en la región se ha visto profundamente afectado. Según el parte médico oficial, entre los heridos se encuentra una adolescente de 15 años, una oficial de policía de 20 años, y varias personas más con lesiones por esquirlas o pérdida temporal de audición. Una paciente hipertensa permanece en estado de shock.
A esta cadena de actos terroristas se suma un atentado ocurrido días atrás, el 6 de junio, en la cárcel de Villahermosa, en Cali, donde cuatro funcionarios del INPEC resultaron heridos tras la detonación de una granada lanzada por hombres en motocicleta.
Las autoridades intensifican los operativos en la región, mientras las comunidades permanecen en alerta ante una amenaza que revive los peores momentos del conflicto armado en el país. La ofensiva, además de su impacto humanitario, reabre el debate sobre la capacidad de respuesta del Estado frente a la reconfiguración de estructuras insurgentes y su estrategia de terrorismo urbano y rural.
