Decisión sobre caso por la pérdida de Juan Felipe Rincón fue aplazada: Fiscalía pide preclusión
El caso aún sigue abierto hasta que se tome una decisión

El Juzgado 44 Penal del Circuito de Bogotá suspendió este 9 de julio la audiencia clave en el proceso por el fallecimiento de Juan Felipe Rincón Morales, joven de 21 años e hijo del general (r) William Rincón, luego de que la defensa solicitara una pausa por motivos de salud del juez Gustavo Aguilera. La diligencia continuará el próximo lunes 14 de julio a las 2 de la tarde.
El debate se centra en la solicitud de preclusión que presentó la Fiscalía a favor de Andrés Camilo Sotelo, cuya responsabilidad en los hechos está en entredicho. La defensa de la víctima, encabezada por el abogado Juan Felipe Criollo, se opone firmemente al cierre del proceso y plantea que aún existen líneas de investigación abiertas que no han sido suficientemente exploradas.
La escena del crimen
Entre los puntos expuestos está la aparición de una sexta vainilla en la escena del crimen, que no correspondería a la dotación oficial del patrullero Sergio Felipe Rico Rueda, hoy investigado penalmente. Según Criollo, este elemento clave podría evidenciar la existencia de una segunda arma, hecho que, de confirmarse, modificaría el curso de la investigación.
El abogado también se refirió a una entrevista hecha a una menor de edad, quien habría declarado que un familiar de Sotelo le pidió que asumiera la responsabilidad para exonerarlo. Para Criollo, este testimonio genera dudas sobre una posible manipulación del caso y refuerza la hipótesis de que habría más implicados.
Durante la audiencia, también se presentaron grabaciones de cámaras de seguridad que mostrarían a tres personas portando elementos potencialmente peligrosos que no han sido incluidas en el expediente. En cuanto a la prueba de pólvora realizada a Sotelo, el defensor expresó reparos sobre su fiabilidad, ya que se practicó varios días después de los hechos, en condiciones que podrían haber alterado los resultados.
María Mercedes Gómez, quien intervino como reemplazo del abogado Iván Cancino, respaldó los argumentos de Criollo y reiteró la necesidad de identificar el arma que disparó el sexto proyectil, aún no atribuida.
El Ministerio Público coincidió en que persisten elementos sin esclarecer. “Pido que se mantenga el proceso y se incluyan las pruebas que no fueron recogidas para saber la verdad. La postura del Ministerio es que no se debe de atender a la petición de la Fiscalía General de la Nación”, expresó el delegado, al considerar que precluir el caso sería prematuro.
El caso sigue abierto y, por ahora, queda en suspenso la decisión judicial que definirá si la investigación continúa o se archiva.