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Amor obsesivo: ¿cómo pasar la página y seguir con la vida?

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El amor puede ser un sentimiento eufórico, pero muchas personas han sentido el dolor de un corazón roto y la intensidad del enamoramiento. El amor obsesivo lleva estas emociones aún más lejos, haciendo que la persona se fije en la persona amada como si fuera un objeto o una posesión.

Los profesionales de la salud no suelen reconocer el amor obsesivo, o el «trastorno del amor obsesivo», como un problema de salud mental. De hecho, actualmente no figura en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, 5ª edición (DSM-5). Sin embargo, el amor obsesivo puede ser una señal de otros problemas y trastornos de salud mental. Si la persona que experimenta sentimientos de amor obsesivo no recibe tratamiento para los síntomas generales, puede tener dificultades para regular estos sentimientos. En casos muy extremos, esto puede incluso llevar a la persona a cometer actos de violencia o abuso. Este artículo trata del amor obsesivo, sus causas y síntomas, y algunas posibles opciones de tratamiento.

¿Amor obsesivo o amor verdadero?

La definición del «verdadero» amor ha sido una incógnita durante siglos. Del mismo modo, no existe una lista única de criterios para distinguir el amor obsesivo del amor verdadero.

Se puede acordar una primera definición del amor de la siguiente manera:

  • una emoción compleja que implica fuertes sentimientos de ternura o afecto hacia la otra persona
  • la experiencia de sensaciones agradables en presencia de la otra persona
  • devoción por el bienestar de la otra persona.

El amor puede adoptar muchas formas, como el amor a los miembros de la familia o a los amigos, la preocupación por otros seres humanos, el amor erótico y el amor propio.

Algunos expertos sugieren que las relaciones amorosas tienen tres componentes esenciales, denominados teoría triangular del amor:

  • pasión
  • intimidad
  • Compromiso

Un artículo de 2020 sugiere que el elemento de la pasión puede incluir comportamientos como:

  • -atención centrada
  • pensamiento intrusivo
  • seguimiento obsesivo
  • posesividad

En algunos casos, estos pensamientos o comportamientos pueden derivar en un amor obsesivo.

El amor también puede provocar cambios físicos en el cuerpo y puede implicar:

  • hormonas como la oxitocina, la vasopresina, el cortisol y la testosterona
  • neurotransmisores como la dopamina y la serotonina
  • factor de crecimiento nervioso.

Para algunas personas, estos sentimientos pueden ser tan poderosos que se obsesionan con mantener y controlar a la persona que aman. Puede parecer que adoran a su pareja a veces, pero se enfadan o se ponen celosos a la menor amenaza.

Según los autores del artículo, los cuatro componentes del amor son:

  • atracción
  • resonancia o conexión
  • confianza
  • Respeto

Algunos de estos factores pueden faltar en el amor obsesivo. Por ejemplo, las personas extremadamente celosas pueden no confiar en su pareja, lo que puede llevarles a intentar controlarla o a vigilar constantemente su comportamiento.

El amor obsesivo puede centrarse en poseer a la pareja, en lugar de verla como un igual. En lugar de amar a la persona y querer lo mejor para ella, las personas con tendencias obsesivas pueden amar a la otra persona para satisfacer sus propias necesidades. El trastorno obsesivo-compulsivo de las relaciones (TOC) consiste en obsesiones sobre una relación cercana o íntima o sobre la pareja y puede incluir un enfoque obsesivo sobre lo poco fiable o no fiable que es la pareja. La desconfianza obsesiva en una relación puede estar relacionada con la depresión, la ansiedad y la violencia en una relación.

El amor obsesivo puede implicar a veces una relación que no existe realmente, por ejemplo con una celebridad o un desconocido. La erotomanía es un trastorno psiquiátrico en el que una persona tiene la creencia delirante de que una persona de mayor estatus social está enamorada de ella. En la erotomanía, el objetivo es recibir amor en lugar de darlo.

Posibles causas de la obsesión amorosa

Son muchos los factores que pueden provocar la obsesión por el amor, como los trastornos delirantes y los problemas de salud mental.

Erotomanía

La erotomanía, o síndrome de Clérambault, es un trastorno psiquiátrico en el que una persona tiene la creencia delirante de que otra persona le ama, normalmente una persona de mayor categoría.

Existen formas primarias y secundarias de erotomanía. En la erotomanía primaria, no hay otros problemas de salud que causen la erotomanía y el delirio erótico es el único síntoma. La erotomanía secundaria puede estar relacionada con otros trastornos psiquiátricos, como la esquizofrenia o el trastorno depresivo mayor. La erotomanía también puede estar relacionada con un traumatismo craneoencefálico, el embarazo, el abuso de alcohol o ciertos medicamentos como las anfetaminas. Un estudio de caso de 2017 sugiere que las redes sociales pueden empeorar la erotomanía. Esto se debe a que permite a las personas con tendencias obsesivas observar a los demás desde la distancia y sentirse más cerca de ellos de lo que lo harían de otro modo.

Trastorno límite de la personalidad

Las personas con trastorno límite de la personalidad (TLP) pueden tener un intenso miedo al abandono y dificultad para controlar sus emociones. Pueden entablar relaciones rápidamente, o tener relaciones intensas con otras personas. Las personas con TLP pueden actuar de forma impulsiva, con intensos cambios de humor. Este trastorno puede tener un impacto negativo en las relaciones de la persona. Pueden sentir una cercanía extrema con otra persona, que puede convertirse repentinamente en aversión. Las personas con TLP pueden no tener una imagen de sí mismas coherente o un sentido de identidad. Esto puede exacerbar las tendencias obsesivas, ya que pueden tener dificultades para verse a sí mismos como reales o valiosos individualmente, independientemente de sus relaciones. Sin embargo, cada persona con TLP tiene diferentes síntomas y diferentes grados de gravedad.

Trastornos del apego

La capacidad de una persona para establecer vínculos sanos con los demás comienza en la primera infancia. Las personas cuyos padres o cuidadores eran inestables o abusivos pueden desarrollar patrones de apego anormales. Esto puede llevarles a ser obsesivos, controladores o temerosos en sus relaciones. Los estilos de apego que las personas desarrollan en la infancia pueden influir en su comportamiento en futuras relaciones como adultos. Si una persona ha tenido una fuente de cuidados estable y receptiva en la infancia, desarrolla un estilo de apego seguro. Esto significa que una persona es probable que sea independiente, que gestione sus experiencias emocionales y que disfrute de relaciones estrechas. Si un niño tiene una fuente de cuidados inestable, puede desarrollar un estilo de apego inseguro. Esto puede hacer que una persona se sienta ansiosa, evasiva o temerosa en una relación. Las personas con un estilo de apego inseguro pueden expresar sus emociones de forma exagerada y ser más dependientes de los demás.

Trauma y miedo al abandono

Los traumas o las experiencias de la infancia que han dado lugar a un estilo de apego inseguro pueden conducir a un miedo al abandono. Las personas que tienen miedo al abandono pueden desarrollar tendencias obsesivas. Pueden temer estar solos, hacer amenazas o tomar acciones impulsivas para evitar que su pareja les deje.

Otros problemas de salud mental

Una amplia gama de trastornos mentales puede distorsionar o cambiar la perspectiva de una persona, haciéndola más temerosa, obsesiva o deprimida. Esto puede aumentar el riesgo de obsesionarse con la relación. Las personas con trastorno de la personalidad dependiente pueden ser pegajosas con sus parejas, necesitan que los demás les tranquilicen constantemente y se sienten indefensas si están solas.

Normas sociales y culturales

Algunas normas sociales y culturales exigen más a un miembro de la pareja que al otro. Esto puede significar que algunos padres y cuidadores expongan a sus hijos a estos estilos de relación poco saludables durante su crianza. Por ejemplo, estar expuesto a diversas «normas» de relación cuando se es niño puede hacer que algunas personas crezcan creyendo que el amor es sinónimo de propiedad, o que su pareja debe hacer lo que quiera para demostrar su amor. Estos patrones de pensamiento son una de las características de la masculinidad dañina o masculinidad tóxica. Las personas con este rasgo pueden creer que es aceptable que los hombres traten a su pareja de forma física o emocionalmente perjudicial. Las personas con signos de masculinidad tóxica también pueden ser controladoras, exigir a su pareja más de lo que están dispuestas a dar, o maltratar a las parejas que rompen sus «reglas».

Si tú o alguien que conoces está en peligro inmediato de sufrir violencia doméstica, pide ayuda o solicita asistencia de emergencia.

Síntomas

Los síntomas de la obsesión por el amor varían en función del motivo de la obsesión. Por ejemplo, una persona con un trastorno delirante puede experimentar una alteración de la realidad o un comportamiento inusual, mientras que una persona con depresión puede tener una baja autoestima o pensamientos suicidas.

En general, los signos de obsesión por el amor son:

  • una intensa preocupación por la relación que es desproporcionada con respecto al tiempo que se conoce a la otra persona
  • enamorarse inmediatamente de una nueva pareja o incluso de un desconocido
  • intentos extremos de controlar a la otra persona
  • amenazar a la otra persona si intenta marcharse
  • negarse a escuchar los sentimientos de la otra persona o a aceptar los límites que intenta establecer
  • Exigir a la otra persona un comportamiento específico y poco razonable.

Otros síntomas pueden incluir diferentes tipos de comportamiento celoso.

Celos obsesivos

Las personas con celos obsesivos tienen pensamientos celosos excesivos y un comportamiento compulsivo. Las personas con celos obsesivos pueden reconocer que sus pensamientos son irracionales. Los síntomas de los celos obsesivos son más extremos que la emoción normal de los celos, e incluyen:

  • pensamientos intrusivos y excesivos de celos, que pueden ser difíciles de dejar de pensar
  • limitar la libertad del cónyuge
  • observar el comportamiento de un compañero

Celos delirantes

Según un artículo de 2018, los celos delirantes se producen cuando una persona está absolutamente segura de que su pareja le es infiel sexualmente, pero no tiene pruebas de esta creencia. Los celos delirantes son un tipo de trastorno psicótico, que también se conoce como síndrome de Otelo.

Los síntomas de los celos delirantes incluyen:

  • la creencia falsa pero cierta de que la pareja es infiel
  • delirios persistentes de infidelidad de la pareja
  • preocupación por la infidelidad de la pareja
  • pensamientos y emociones paranoicas e irracionales
  • comportamiento inaceptable o extremo.

Diagnóstico

Un profesional de la salud mental puede decidir que la relación de una persona es obsesiva en función de los síntomas que presente y de si tienen o no un impacto negativo en su vida. No existen criterios de diagnóstico específicos para el amor obsesivo. El amor obsesivo puede ser un signo de otro problema de salud mental. Por lo tanto, el profesional sanitario puede hacer preguntas sobre el historial de salud mental de la persona. También pueden recomendar pruebas psicológicas o médicas para descartar otras causas, sobre todo si la persona presenta un comportamiento delirante. Si un profesional de la salud sospecha de un trastorno como el TOC, puede utilizar el Inventario de Desconfianza Obsesiva (ODIS), que es una escala que evalúa cómo percibe la persona a su pareja.

Tratamiento

El tratamiento del trastorno obsesivo-compulsivo consiste en identificar la causa de los pensamientos y sentimientos obsesivos y, luego, tratar esa causa. Una persona con un trastorno de la personalidad puede necesitar psicoterapia y medicación para controlar los síntomas, como la ansiedad o los cambios de humor. Un plan de tratamiento puede implicar aprender más sobre la enfermedad, aprender estrategias de afrontamiento sanas para lidiar con las emociones y mantener un estilo de vida saludable. La terapia puede ayudar a las personas a controlar sus sentimientos obsesivos y a desarrollar relaciones más saludables.

Un terapeuta puede ayudar a procesar el trauma, gestionar las condiciones subyacentes y establecer normas de relación más saludables. Al principio del tratamiento, lo mejor es la terapia individual, especialmente si la relación es abusiva. Si cada persona de la relación es capaz de establecer mejores límites individualmente, la terapia de pareja puede ayudarles a trabajar juntos y a superar el amor obsesivo. No existe un plan de tratamiento ni un calendario específico para recuperarse del amor obsesivo. Es una experiencia individual que depende de muchos factores, desde el nivel del amor obsesivo hasta la condición subyacente que pueda estar causándolo.

Cuándo consultar al médico

Si las personas que sufren de amor obsesivo son conscientes de su comportamiento, es importante consultar a un médico para averiguar la causa subyacente y comenzar un plan de tratamiento.

Una persona que sufre de amor obsesivo puede no ver su comportamiento como problemático. Por el contrario, pueden considerar que el objeto de su afecto no es lo suficientemente cariñoso o leal, y creen que la otra persona es el problema. Esto puede significar que una persona puede tener dificultades para buscar tratamiento. Las personas a las que les resulta difícil abandonar una relación o que se sienten muy inseguras en una relación pueden considerar la posibilidad de que su amor sea obsesivo e intentar buscar tratamiento. Si experimenta un amor obsesivo, es posible que desee pedir consejo a un profesional de la salud.

 

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Maria G.
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