¿Alguna información? ¿Necesitas contactar al equipo editorial? Envía tus correos electrónicos a [email protected] o ve a nuestro formulario.
Estilo de vida

Según investigación, los viajes contribuyen a nuestra salud mental

Suscribite a nuestro canal para recibir toda la información

Tras dos años de la pandemia de Covid-19, que restringió considerablemente los viajes, un equipo de investigación australiano ha puesto de manifiesto los beneficios de los viajes en la salud mental de las personas más vulnerables.

¿Y si irse de vacaciones pudiera ser una nueva forma de terapia para aquellos cuya salud mental es más frágil? En el imaginario colectivo, los viajes son una experiencia recreativa diseñada para nuestro placer, pero los investigadores australianos reclaman un cambio en la forma de ver el turismo en la actualidad. De hecho, también podría tener beneficios reales para nuestra salud, según un estudio de la Universidad Edith Cowan (ECU) publicado en la revista Tourism Management.

«Los médicos expertos pueden recomendar tratamientos contra la demencia como la musicoterapia, el ejercicio, la estimulación cognitiva, la terapia de reminiscencia, la estimulación sensorial y las adaptaciones de los horarios de las comidas y el entorno del paciente», dijo el Dr. Jun Wen, investigador principal del estudio. Y todos estos elementos se pueden encontrar en nuestras vacaciones.

Puede interesarle: Los 5 hoteles más lujosos del mundo

Ejercicio físico y exposición a la vitamina D

Por ejemplo, estar en entornos desconocidos y tener nuevas experiencias puede estimular el cerebro y los sentidos. «El ejercicio se ha relacionado con el bienestar mental y los viajes suelen implicar un aumento de la actividad física, como por ejemplo caminar más», explica el Dr. Wen. Y como los turistas pasan más tiempo al aire libre, aprovechan más el aire fresco y el sol, que aumentan los niveles de vitamina D y serotonina, conocida como la hormona del bienestar.

Las comidas también suelen ser más flexibles y se adaptan más fácilmente al entorno y a las necesidades del paciente. «Las comidas suelen ser diferentes durante las vacaciones: suelen ser asuntos más sociales con varias personas y se ha comprobado que las comidas de tipo familiar influyen positivamente en el comportamiento alimentario de los pacientes con demencia», dice el investigador.

Tras dos años de pandemia por el virus Covid-19, durante los cuales fue casi imposible viajar y que dejó su huella en la salud mental de la población mundial, el Dr. Wen cree que «es el momento adecuado para identificar el lugar del turismo en la salud pública, y no sólo para los turistas sanos, sino para los grupos vulnerables».

¿Le resultó útil este artículo?
Lee también:
James García Rodríguez
Suscribite a nuestro canal para recibir toda la información