Caso Juan Felipe Rincón: Fiscalía reactiva la investigación y llama a siete indiciados a interrogatorio
El avance en la investigación ocurre justo cuando está próximo a cumplirse el primer aniversario del crimen, perpetrado el 24 de noviembre de 2024 en el barrio Quiroga, al sur de Bogotá, sin que hasta ahora se haya identificado al responsable directo.

La Fiscalía General de la Nación ordenó una nueva ronda de interrogatorios dentro del expediente por el asesinato de Juan Felipe Rincón, hijo del director de la Policía Nacional. La decisión, conocida por W Radio, involucra a siete personas que pasan oficialmente a calidad de indiciadas mientras se reevalúan pruebas y procedimientos que habían sido cuestionados por un juez de conocimiento.
Entre los citados se encuentran Andrés Camilo Sotelo Torres —imputado por el homicidio— y su hermana, Katherin Sotelo Torres. También deberán presentarse ante los fiscales Laura Daniela Carrión Gil, Sebastián Correal Ramos, Cristian David Ortiz Castro, Yeimi Tatiana Vega López y Carlos Fernando Galeano Medina.
El avance en la investigación ocurre justo cuando está próximo a cumplirse el primer aniversario del crimen, perpetrado el 24 de noviembre de 2024 en el barrio Quiroga, al sur de Bogotá, sin que hasta ahora se haya identificado al responsable directo.
La información entregada
En paralelo, la menor de 16 años que estuvo con la víctima antes del ataque aportó recientemente información considerada clave para reconstruir la ruta de los hechos. Su testimonio también se vincula con la denuncia por tortura interpuesta en enero por el abogado Juan Felipe Criollo en nombre del general William Rincón. El representante legal sostuvo ante este medio que existe plena confianza en que los nuevos pasos judiciales aceleren la búsqueda de responsables: “Confiamos en que la justicia siga avanzando y dé resultados próximos conforme a las pruebas que reposan en el proceso”.
Estas actuaciones atienden, además, las exigencias hechas por un juez en julio pasado, cuando rechazó la solicitud de preclusión presentada por la propia Fiscalía en favor de Sotelo. Durante esa audiencia, el despacho reprochó fallas en la recolección de evidencias e instó a explorar hipótesis que no habían sido consideradas a fondo, entre ellas la posibilidad de una extorsión: “Hay indicios que deben ser evaluados de manera seria y exhaustiva, incluyendo la posibilidad de un trasfondo económico o de amenazas previas”.
El expediente contiene otros elementos que profundizan las dudas sobre lo ocurrido. Investigadores privados detectaron inconsistencias en la escena del crimen, como la presencia de seis vainillas, una de ellas de una marca que no corresponde al arma del escolta de la víctima. Videos y audios recolectados en el sector registraron al menos ocho disparos, pese a que el arma del escolta solo admite seis cartuchos, lo que abre la puerta a la participación de una segunda arma.
También figura un señalamiento sobre una camiseta con un orificio de bala que la Fiscalía presentó como evidencia. Peritos forenses establecieron que la prenda no fue usada por Rincón el día del ataque, lo que deja interrogantes sobre su procedencia y autenticidad. A esto se suma la demora en practicar la prueba de residuos de pólvora a Sotelo, un procedimiento que, según la defensa, debía realizarse de forma inmediata.
Con estas nuevas diligencias, la Fiscalía intenta retomar el control de una investigación marcada por inconsistencias y exigencias judiciales, en un caso que mantiene la atención del país y de la institución policial.





