¿Cómo detectar un lunar canceroso?
Aunque la mayoría de los lunares son benignos, algunos pueden provocar un melanoma, un tumor maligno que requiere cirugía. Además, la detección precoz aumenta las posibilidades de recuperación y reduce el riesgo de reaparición del melanoma. Aprenda a reconocer un lunar sospechoso para detectar este tipo de cáncer lo antes posible.
Dos tipos de cáncer de piel a tener en cuenta
Hay que tener en cuenta dos tipos principales de cáncer de piel: los carcinomas o epiteliomas, que son los más comunes, y los melanomas, más raros pero en constante aumento.
Carcinomas:
Estos cánceres están causados por una proliferación maligna de los queratinocitos, las células de la epidermis que componen la queratina. En la mayoría de los casos, este cáncer es un carcinoma de células basales y se desarrolla localmente. Pero en el 20% de las personas que padecen la enfermedad, se trata de un carcinoma de células escamosas que puede convertirse en un cáncer metastásico.
Melanoma:
La tasa de mortalidad de este tipo de cáncer se sitúa en torno al 15%. Sin embargo, la mayoría de los melanomas pueden curarse si se detectan a tiempo.
Realización de una autoexploración para favorecer la detección precoz del melanoma
Para detectar el melanoma en una fase temprana, hay que realizar un autoexamen. La Dra. Susana Corrales, explica la regla ABCDE para controlar la aparición de un lunar sospechoso:
- A (asimetría): si la forma del nevus es asimétrica, lo mejor es acudir a un dermatólogo
- B (bordes): los bordes irregulares, borrosos y poco definidos pueden indicar un lunar de riesgo
- C (color): si el color es parejo y uniforme, el lunar es seguro. Pero si tiene una zona más oscura que otra o muestra varias tonalidades, hay que vigilarlo de cerca
- D (diámetro): el riesgo de melanoma es mayor cuando la lesión es mayor de 6 mm. Por lo tanto, el tamaño de un lunar debe alertarle y hacerle consultar a un médico
- E (evolución): Los lunares atípicos que cambian de aspecto deben preocuparle. Si un lunar crece, o cambia de color o forma, o si una mancha aparece rápidamente, debe acudir a un especialista para que le examine la piel.
Prevención de los cánceres de piel
Evitar la exposición al sol entre las 11 y las 17 horas
Especialmente los niños y las personas de piel clara. La exposición al sol o a la radiación ultravioleta, por ejemplo mediante el bronceado artificial, aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel. De hecho, la exposición prolongada a la luz solar es el principal factor de riesgo del melanoma maligno. Además, si la piel se expone al sol durante la infancia y hay antecedentes de quemaduras solares, la persona tiene más probabilidades de desarrollar un melanoma en la edad adulta.
Opte por cremas solares con un índice mínimo de 30
Por supuesto, hay que comprobar la fecha de caducidad y no guardar la misma crema durante varios años, ya que la calidad de los filtros UV se deteriora
No deje que los niños salgan al sol sin protección
Se recomienda usar protección solar, sombrero y camiseta para evitar las quemaduras solares y limitar la aparición de melanomas en la edad adulta.
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