Se intensifica el escándalo en torno a la nueva Miss Universo
La victoria de Fátima Bosch se ha visto empañada por una ola de polémicas que cuestionan su mérito para haber obtenido la corona

La elección de Fátima Bosch como nueva Miss Universo, celebrada el pasado 20 de noviembre, continúa generando repercusiones internacionales luego de que distintas voces cuestionaran la legitimidad del resultado. Lo que comenzó como un hito para México terminó convertido en un foco de sospechas que involucran a figuras clave dentro y fuera de la organización.
El origen de la controversia está en las declaraciones de Rodrigo Goytortúa, ex CEO del concurso, quien aseguró en una entrevista con el periodista Javier Ceriani que detrás de la coronación existirían acuerdos económicos entre el presidente de Miss Universe, Raúl Rocha, y Bernardo Bosch, padre de la ganadora. Sus afirmaciones, aunque no han sido verificadas por autoridades ni por la organización, encontraron eco inmediato en redes sociales, donde abundan mensajes de respaldo y llamados a esclarecer lo ocurrido.
La versión de Goytortúa apunta a supuestos contratos de gran valor que, según él, habrían generado un ambiente favorable para la representante mexicana desde etapas tempranas del proceso. Asegura haber entregado documentos y testimonios internos que, en su criterio, cuestionan la imparcialidad del certamen.
La renuncia de los jurados
La polémica escaló cuando Omar Harfouch, jurado que renunció antes de la gala final, reveló que Rocha le habría pedido emitir su voto a favor de Bosch argumentando “compromisos empresariales” con su padre. Sus palabras avivaron aún más el malestar entre seguidores del concurso y dispararon las críticas hacia la directiva.
El ambiente posterior a la gala fue tenso: en los alrededores del escenario se escucharon exclamaciones de “fraude”, en especial entre grupos asiáticos inconformes con la derrota de Miss Tailandia. Incluso una periodista de ese país confrontó directamente a Rocha para preguntarle si la corona había sido pactada.
Hasta ahora, Fátima Bosch no ha respondido a ninguno de estos señalamientos. La nueva soberana únicamente ha expresado su intención de asumir el título con responsabilidad, mientras las dudas sobre la transparencia del concurso siguen aumentando.





