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Estilo de vida

Lava tu vestido de baño de la manera correcta para que no pierda color

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El vestido de baño es una pieza que no puede faltar en tu closet, pues siempre están las posibilidades abiertas de que salga un plan de manera imprevista para ir a la piscina o la playa.

Ahora bien, ya sea de una pieza o de dos, los vestidos de baño se exponen mucho al sol y a la sal del agua, en caso de la playa, y al cloro y demás químicos, en el caso de la piscina; razón por la cual podría perder su color rápidamente si no se cuidan de la manera debida en el ciclo de lavado.

¿Cómo es el levado correcto de un vestido de baño?

Lo primeros que debes hacer es mirar la etiqueta para que el texto que allí está plasmado te indique qué productos sí y cuáles no son los que puedes utilizar en el ciclo de lavado. Ojo, no esperan a que pasen tres, cinco o 10 días después de la playa o la piscina para lavarlo, pues y el cloro y la sal puede dañar la fibra textil.

No uses lavadora; lava las piezas a mano y con agua fría, elimina los restos de arena con abundante agua, no uses suavizantes comerciales, secadoras o planchas porque podrás dañarlo y no los pongan a secar el sol durante mucho tiempo.

Dato: si te quieres echar bloqueador, hazlo media hora antes de colocarte el traje de baño, pues los componentes de este tipo de cremas puedes desteñirlo.

Atento a estos pasos con tus vestidos de baño

Desarma el vestido de baño en la medida que sea posible, es decir, saca todas las partes que se puedan sacar (como las copas de los senos, por ejemplo) y lávalas por separado dándoles la vuelta. Coloca agua en un envase con un detergente que sea compatible con el tipo de tela de tu prenda.

Con tus manos has una especie de centrifugado para que el detergente se active en la ropa y si tiene manchas estruja también con tus manos, no tan fuerte para romper o estirar la tela, sino de la manera suficiente para despercudir. No uses suavizante, puedes sustituir este elemento por dos chorritos de vinagre blanco. Sécala con sacudida y no exprimiendo, y tiende por un rato. Recuerda que es importante la no exposición prolongada al sol.

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María Vargas Jimenez
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