Colombia

Las playas más peligrosas del mundo: una está en Colombia

Antes de planear un viaje siempre debes documentarte sobre los pro y contra del lugar de destino

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Con el fin de año llegan las vacaciones y para nadie es un secreto que cuando se habla de descanso vacaciones una de las primeras opciones que saltan a la mente, son las playas. El mundo tiene miles de ellas y muy hermosas, pero algunos son especialmente peligrosas y no se deberían visitar.

A propósito, el medio de comunicación Chic ha hecho un ranking de las cinco playas que están alrededor del mundo y que ninguna persona debería visitar bajo ningún concepto, pues de lo contrario podría estar exponiéndose a un peligro irreversible.

Una de ellas está ubicada en Colombia, específicamente en el departamento Magdalena, que es de los más turísticos de todo el país. Su nombre es Playa Cañaveral y hace parte del parque Tayrona, el cual año tras año recibe a miles de turistas. Sin embargo, este espacio en específico está cerrado pues se ha determinado que el agua tiene la denominada ‘corriente de río’ y por eso es capaz de arrastrar a los bañistas a lo más profundo, sin posibilidad de retorno.

Otras cuatro playas prohibidas en el mundo

En la lista también está la playa Chowpatty en Mumbai-India, ya que se trata de uno de los espacios naturales que en algún momento tuvo fines turísticos, pero ahora solo es un sitio en el que sobreabunda la contaminación y es riesgoso para las personas desde cualquier punto que se mire.

Algunos voluntarios han intentado restaurarla haciendo una limpieza masiva, pero el nivel de suciedad que hay en la zona ha hecho que el trabajo se complica. Muchas personas que se han aventurado a bañarse en sus aguas, han resultado con enfermedades cutáneas.

La playa del Atolón Bikini en Micronesia integra de igual forma esta lista, porque fue un campo de pruebas nucleares y en sus aguas explotaron 67 bombas nucleares estadounidenses entre 1946 y 1958. Desde ese entonces la declararon «desierto nuclear» por el riesgo de los efectos secundarios de las detonaciones.

A estas se suman las playas ubicadas en la isla Gansbaai en Sudáfrica, a cuyas aguas se les conoce como «la capital del tiburón blanco» por la cantidad de especies de este tipo que merodean a sus anchas y que son un claro peligro si la humanidad entrara en contacto con ellas.

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Víctor Castro Gutierrez
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