EE. UU. intensifica presión militar cerca de Venezuela y Maduro ordena despliegue masivo de milicianos
La acción ha avivado las tensiones en América Latina

La tensión entre Estados Unidos y Venezuela volvió a escalar esta semana luego de que Washington aumentara su presencia militar en aguas del Caribe, en zonas cercanas al territorio venezolano, como parte de una operación regional contra el narcotráfico. En respuesta, el presidente Nicolás Maduro anunció el despliegue de más de cuatro millones de milicianos dentro del país, en lo que calificó como un “plan especial” de protección nacional.
El refuerzo estadounidense incluye al menos 4.000 efectivos, mayoritariamente infantes de Marina, así como aeronaves, barcos y sistemas de defensa avanzados, según confirmaron fuentes oficiales a medios internacionales. La operación coincide con el anuncio del Departamento de Justicia de EE. UU., que elevó a 50 millones de dólares la recompensa por información que permita la captura de Maduro, quien enfrenta cargos por narcotráfico en tribunales estadounidenses.
Desde Caracas, Maduro aseguró que la milicia bolivariana será desplegada en todo el país, aunque no especificó en qué regiones se concentrarán ni cuál será su función operativa concreta. “Esta semana voy a activar un plan especial para garantizar la cobertura con más de 4,5 millones de milicianos en todo el territorio nacional”, declaró durante un acto transmitido por la televisión estatal.
Una respuesta a las amenazas externas
El mandatario presentó la medida como una respuesta defensiva frente a amenazas externas, y subrayó que las unidades milicianas deben mantenerse “preparadas, activadas y armadas”. Añadió que el objetivo es establecer presencia territorial organizada “por sectores”, sin detallar su estructura ni duración.
Además del componente militar, Maduro apuntó contra organizaciones internacionales, a las que acusó de intentar generar divisiones internas en el chavismo. En particular, señaló a la Fundación Rosa Luxemburgo, con sede en Alemania, por presuntamente financiar discursos críticos desde sectores de izquierda. “Mucho cuidado con el entrismo, el divisionismo y el poco e’ rial que ponen las potencias europeas y el imperialismo”, advirtió.
En ese mismo discurso, también reiteró acusaciones contra ONGs locales que, según él, estarían recibiendo apoyo económico de agencias como USAID y la CIA para desestabilizar al país tras las elecciones presidenciales de 2024.
El contexto en Venezuela sigue marcado por una profunda crisis social, denuncias de represión y aislamiento internacional. Con el aumento de la presión diplomática y militar desde Washington, el gobierno de Maduro refuerza su discurso de defensa nacional mientras crecen los cuestionamientos dentro y fuera del país.