Benedetti critica a la Corte y acusa al magistrado Ibáñez de interferir políticamente en la reforma pensional
El ministro ha sido nuevamente señalado de no respetar la autonomía del sistema judicial
La reciente decisión del magistrado Jorge Enrique Ibáñez, que ordena nuevas pruebas dentro del control constitucional a la reforma pensional, desató una airada reacción del ministro del Interior, Armando Benedetti. En medio del aplazamiento de la discusión clave en la Corte Constitucional, Benedetti acusó al togado de actuar por motivaciones políticas y no jurídicas, en un momento en que el Gobierno busca implementar una de sus reformas más importantes.
La controversia estalló luego de que el diario El Tiempo revelara el contenido del auto firmado por Ibáñez, el cual solicita información detallada sobre las sesiones extraordinarias del Congreso realizadas el 27 y 28 de junio, que fueron fundamentales para corregir vicios de trámite detectados en el proceso legislativo.
Frente a este hecho, Benedetti fue categórico. A través de su cuenta de X, dejó en el aire una inquietante pregunta que resume el malestar del Gobierno: “¿En ese auto hay más política que Ley?” El ministro no solo cuestionó el fondo de la decisión, sino que puso en duda la imparcialidad de la Corte en el tratamiento de una ley que, según sus palabras, millones de colombianos esperan con urgencia.
“¿Cómo es posible que el magistrado Ibáñez ponga en duda lo que diga el presidente de la Cámara y altere el procedimiento de la revisión de una Ley que 3 millones de viejos y viejas están esperando?”, escribió Benedetti, aludiendo al impacto social del nuevo sistema pensional y al hecho de que el Congreso ya había dado luz verde al proyecto en dos ocasiones.
“Una obstaculización del proceso”
La crítica del ministro se centró también en lo que considera una obstaculización del proceso legislativo desde la rama judicial. Benedetti insinuó que la Corte estaría excediendo sus funciones al frenar la entrada en vigencia de una ley que, en opinión del Ejecutivo, ya superó las etapas institucionales necesarias.
Aunque la Corte no ha respondido oficialmente a los señalamientos, la decisión de suspender la discusión mientras se analiza la validez de las sesiones del Congreso ha generado una nueva fricción entre el alto tribunal y el Gobierno.
La reforma pensional sigue en el limbo, a la espera de que se resuelvan los cuestionamientos procedimentales. Entre tanto, la tensión entre poderes crece y la controversia se amplía, con un ministro que no duda en señalar públicamente lo que interpreta como una jugada política desde la Corte Constitucional.
