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Estilo de vida

7 consejos para eliminar los ácaros del colchón

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Los ácaros son criaturas diminutas que se instalan en zonas cálidas y húmedas de la casa. Nuestra ropa de cama es una zona privilegiada para que crezcan, pero también se alimentan fácilmente de nuestra piel muerta. Se alojan en nuestros colchones, almohadas, edredones, cojines, fundas, cortinas o peluches y pueden ser especialmente alergénicos. Pueden desencadenar alergias cutáneas (eczemas, picores, rojeces…), oculares (ojos rojos, conjuntivitis…) e incluso respiratorias (tos, estornudos, aumento del asma…). A continuación se explica cómo eliminar los ácaros del polvo en el colchón y la ropa de cama.

¿Cómo evitar los ácaros del polvo en su casa?

  1. Tenga cuidado con la elección de la ropa de cama

Sobre todo, elige un somier de madera en lugar de un somier de láminas y presta atención a la calidad del colchón. Prefiere el látex a la lana o las fibras textiles. Además, siempre que sea posible, elija ropa de cama de cáñamo (antifúngica, antibacteriana y antialérgica) o de material sintético antiácaros.

  1. Elige bien la decoración

En primer lugar, limite las fuentes de humedad en la habitación que favorecen la proliferación de ácaros: acuarios, agua estancada en plantas verdes… Si es necesario, instale un deshumidificador de aire para combatir el exceso de humedad. Por lo demás, prohíbe las alfombras y evita las que no sean fácilmente lavables. Además, no hay que superar los 18 o 19°C de calefacción en la habitación. Un último punto: limita los cachivaches (que acumulan polvo) y no dejes montones de ropa limpia o sucia por la habitación. Asegúrate de tener un armario cerrado.

  1. Un largo proceso de limpieza para eliminar el riesgo de ácaros

Airee la cama y la habitación todos los días durante al menos 15 o 30 minutos. Además, cambia las sábanas y las toallas cada semana, o incluso cada dos semanas como máximo. Lávelos a 60°C para eliminar las células muertas de las que se alimentan. Por último, aspire con mucha regularidad con un filtro HEPA para evitar que se levante el polvo alergénico. Acuérdate de aspirar los listones y los rincones donde se acumula el polvo y de cambiar más a menudo la bolsa y el filtro.

¿Cómo deshacerse de los ácaros instalados?

Incluso cuando se obtienen en las farmacias, no se recomiendan los acaricidas químicos. A menudo son ricos en ingredientes tóxicos (pesticidas, etc.) y también son ineficaces. De hecho, son los restos de los cadáveres y los excrementos de los ácaros los que son alergénicos. Matarlos no elimina las alergias, de ahí la importancia de la prevención. Deshacerse de ellos una vez que se han instalado es importante, ¡pero sin soluciones insalubres! A continuación se explica cómo deshacerse de ellos de forma natural.

  1. Bicarbonato de sodio para eliminar los ácaros del polvo

El bicarbonato de sodio es un gran eliminador natural de ácaros. Se estima que 4 cucharaditas de bicarbonato por m2 eliminan el 80% de los ácaros en 1 hora y el 100% en 2 horas. Para beneficiarse de este efecto antiácaros, espolvoréelo sobre el colchón y la almohada, cepíllelo, déjelo durante 4 horas y aspírelo con cuidado.

  1. Luz solar para eliminar los ácaros del polvo

Ponga su colchón al sol durante varias horas para eliminar los ácaros del polvo.

  1. Un lavado de choque muy regular

Congele durante 48 horas todo lo que no pueda lavarse a 60°C (almohadillas, pelusas, etc.). Lave las sábanas una vez a la semana a 60°C y las almohadas/mantillas/mantas, etc., cada 6-8 semanas a 60°C.

  1. Aceites esenciales contra los ácaros

Existen aceites esenciales contra los ácaros: aceite esencial de lavanda, árbol de té, eucalipto, menta, madera de cedro, limón, clavo o palmarosa. Teniendo en cuenta las contraindicaciones (mujeres embarazadas y lactantes, niños menores de 6 años, etc.), utilícelos en su lucha contra los ácaros. Por ejemplo, añada 25 gotas a su detergente líquido casero. Si no, haz un spray con 1,5 litros de agua, el zumo de 2 limones y 2 cucharaditas de un aceite esencial. Pulverícelo sobre las zonas a tratar y déjelo secar.

Advertencia: La limpieza a vapor no tiene una eficacia probada. Peor aún, en lugar de deshacerse de ellos, aumenta la humedad relativa, lo que favorece el desarrollo de los ácaros del polvo.

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